Profundizando en el concepto de «mente de aprendiz»
Seguimos profundizando en el concepto de «mente de aprendiz», para conocer los elementos claves y poder aplicarla de manera sencilla.
En el artículo anterior post #MindfulnessBienestar4, hemos mencionando este principio de la «mente de aprendiz» como uno de los pilares fundamentales que aplicar cuando hacemos meditación consciente.
Nuestra mente cataloga y etiqueta cada nueva situación, acomodándolo al patrón generado anteriormente durante mi experiencia vital, quiere decir, que todo lo que se asemeja, le pone la misma etiqueta, en función de si es más o menos agradable, si le resulta más o menos gustoso, etc…
Ello quiere decir, que cuando una situación se nos repite de manera recurrente, y ya le he puesto una etiqueta, por ejemplo “que tedioso me resulta este informe”; “que aburrida es esta reunión”; “estoy agobiad@con esta situación”, etc… cuando aparece de nuevo la misma situación, o alguna que se le asemeje, ése es el estado mental, corporal y emocional que se reproduce de manera automática.
El piloto automático tiene la funcionalidad de contribuir al ahorro de energía de tu cuerpo y tu cerebro. Por ello, en muchas ocasiones te ayuda a optimizar y es positivo. Cuando eres consciente que lo aplicas para ganar rapidez y efectividad, este “darte cuenta o insight” te acerca a la atención plena y te alejar al estado de dispersión.
Te proponemos ponerte «las gafas de principiante o de observador» que lo ve todo por primera vez, desde tu respiración, tu familia, tus compañeros de trabajo, una situación agradable, una problema que se te resiste aplicando la siguiente secuencia:
Aléjate del automatismo, tomando conciencia de las sensaciones corporales que afloran y de cómo oscila tu respiración.
Observa todos los detalles como si fuera la primera vez, y elimina juicios de valor y certezas previas que puedas tener.
Imagínate que eres un marciano que llega a la tierra ¿qué diría?;¿en qué se fijaría?;¿toma valor algún detalle en el que no te habías fijado previamente?;¿Puedes explorarlo sin asemejarlo a nada conocido?.
Se consciente de lo que sientes y reconócelo, aceptándolo sin más, ya sea agradable o desagradable.
Suelta la emoción y disuélvela como el agua que fluye por un río y se renueva en cada momento.
Sé consciente de tus recursos y de cómo aplicarlos de una manera más creativa, para hacer la experiencia más novedosa.
Esperamos que te haya gustado. Comparte con nosotros cualquier duda que te pueda surgir y estaremos encantadas de resolverla.
Mi experiencia es que muchas cosas no son tan malas como pensé que sería.
– Mary Doria Russell.